Una entrevista de trabajo es una reunión muy importante y decisiva que puede influir seriamente a la hora de ser contratado. Lamentablemente, nunca he asistido a una entrevista de trabajo formal. Espero que esta acción no se retrase mucho, pero mientras tanto, vamos a analizar diversas pautas que pueden ayudarnos a pasar esta prueba con éxito.
§ Varios días antes de ir a la entrevista es obligatorio estudiar la historia, situación y posicionamiento de la empresa. Es muy importante mostrar un gran interés hacia la organización. Este factor puede ser decisivo.
§ La vestimenta es muy importante. Cuento tenga mi primera entrevista intentaré no arriesgar demasiado con mi “look”. Seguramente escogeré una imagen elegante y vestiré de tonos azules, que tienen una connotación de sinceridad.
§ La comunicación no verbal dice mucho de las personas. Intentaré no hacer movimientos bruscos ni expresiones exageradas. Me mostraré serena pero evitaré tener una actitud fría.
§ Escucharé con atención y asentiré con la cabeza en alguna ocasión. Además es aconsejable evitar hablar sobre ciertos temas, como es el caso del sueldo, política, vacaciones u horario. Únicamente lo haré si el representante comenta alguno de esos aspectos.
§ No hablaré mocho sobre mí. Puedo parecer egocéntrica y prepotente. En todo momento hay que tener presente que el tema central de la entrevista versa sobre la empresa.
§ Por otro lado, la sinceridad es la clave fundamental de la entrevista. No debemos exagerar ninguno de nuestros rasgos ni competencias, ya que eso nos aleja de una imagen totalmente profesional.
Estos son algunos puntos que tendré en cuenta cuando me llegue la hora. Espero cumplirlos todos estrictamente y lograr mi objetivo. Mientras tanto, lo más inquietante es la espera a que me llamen de alguna empresa y poder llevar a la práctica todas las pautas expuestas anteriormente. Deseadme suerte.
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